Y es que con los continuos avances tecnológicos, los cientos de negocios online que se crean cada día, los constantes cambios de algoritmo en las redes sociales y estrategias de marketing, es cada vez más complejo seguir el ritmo y destacar entre una multitud que busca lo mismo que tú. Por lo que terminas abrumada entre tanta información, sin saber qué hacer, cómo mostrar lo que haces, ni por dónde empezar a hacerlo.
Así que intentas seguir el ritmo, observando lo que hacen los demás e intentando adaptarlo a lo que haces en tu negocio, porque si a los demás parece funcionarles, piensas que lo más lógico es que también te funcione a ti. Pero te encuentras con que la mayor parte del tiempo no funciona y cuando lo hace, atraes a clientes con los que no te gusta trabajar y que decides atender porque es mejor que no tener clientes.
Lo entiendo, he estado ahí.
Poner en palabras el propósito que mueve lo que haces y da vida a tus servicios, es como jugar a la ruleta rusa esperando atraer a tus clientes soñados, cada vez que escribes un post, envías un email o les dices que vean tu web.
Y el resultado seguirá siendo el mismo, porque mientras uses palabras que suenan ajenas en tu propia boca y utilices estrategias de marketing que no resuenan contigo, tus mensajes no serán auténticos y eso las personas lo notan.
¿O tú le comprarías a una marca que lo que dice no le sale natural, sino que parece que estuviera leyendo el guión que fue escrito para alguien más?
Einstein lo supo muy bien cuando lo dijo.
Y yo no sé tú, pero ese no es el tipo de locura que me interesa y menos si te trata de mi negocio.
Pero, no te preocupes, que llevo la psicología en mis venas y te voy a enseñar, a desafiar las reglas en tu negocio y destacar con tu mensaje, siendo 100% tú, sin seguir guiones escritos por ChatGPT ni estrategias prefabricadas para otros.
¿Te atreves a lanzarte?
Un consultorio, una agenda y clientes que iban y venían, era lo que quería, hasta que un día, no lo quise más. Lo que hacía ya no resonaba conmigo, así que lo dejé todo por irle a dar la vuelta a Sudamérica, mientras recuperaba de nuevo mi voz.
Año y medio más tarde, y nueve países después, regresé a casa, al consultorio, para hacer realidad un sueño. Puse en palabras todas las historias que se tejieron en mi mente durante los últimos años, logrando incluso ser bien pagada por mis novelas.
Pero, algo seguía faltando porque no encontraba la manera de unir mis grandes pasiones y fue entonces cuando entré en el mundo del marketing, convirtiéndose en un faro en medio de la oscuridad. Eso que yo creía imposible de encontrar ya existía y se llamaba Copywriting. Y con mi experiencia en las letras y en el comportamiento de las personas, podía ir aún más profundo para hacer que las palabras conectaran de forma humana, auténtica y consciente.
Así fue cuando dos emprendimientos fallidos más tarde, después de trabajar en agencias de marketing y con clientes con los que no vibraba ni conectaba con su mensaje, decidí que quería hacer las cosas diferentes. Estaba harta de trabajos convencionales, quería ser mi propia jefa y ayudar a otras dueñas de negocio con mis talentos, para pulir el valor de lo que ofrecen y convertirlo en el diamante que tienen el poder de ser.
Pero para lograrlo, yo tenía que ser la primera en experimentar esa transformación y estaba consciente de que no podía hacerlo todo sola.
Así que invertí en mentores, asesorías y formaciones no solo sobre marketing y comunicación estratégica, sino sobre branding, imagen de marca y mucho trabajo interior, porque todo en ti comunica.
No voy a endulzarte las cosas y decirte que fue fácil, fueron más de 6 meses atravesando esta metamorfosis que me ayudó a conectar con mi propósito, encontrar mi voz y empoderarme de mi mensaje.
Porque para mí no se trata de escribir para atraer más clientas y vender más. Se trataba de ayudar a más mujeres para que as u vez ayudaran a otras mujeres a mejorar sus vidas. Si lo que quieres en vender más, este no es el lugar para ti.
No tienes que conformarte con ser una marca más, cuando tienes todo lo que se necesita para ser extraordinaria, solo tienes que dar el paso y atreverte experimentar la búsqueda de tu identidad de marca para transformar tu comunicación y también tu negocio, porque los diamantes merecen ser vistos y nunca ocultan su brillo.
Y ese es el motivo por el que estoy aquí.
Y en especial, reconectar con su comunicación y con su negocio, reavivando el placer por lo que hacen, mientras abundan mujeres preguntando por sus servicios.
Escribo novelas para mujeres. Mujeres iguales o más románticas que yo y que les guste un toque extra de erotismo, para esas noches solas en casa donde es necesario hacer volar la imaginación y olvidar un día pesado en el trabajo.
Soy una amante del vino y de sentarme en el sofá los viernes por la noche a ver una peli romántica acompañada del sabor suave, dulce y afrutado de una copa fría de Ròse. Aunque dependiendo de mi estado de ánimo, me decanto por una elegante e intensa copa de Merlot o Malbec.
Adicta al orden, tanto que cuando tengo la cabeza hecha un lío me convierto en cenicienta, solo que sin ratones que sean mis asistentes, y con Alexa reproduciendo Camilo de soundtrack en lugar de pájaros silvestres que me hagan de banda sonora.
Durante año y medio recorrí toda Sudamérica de Colombia hasta el fin del mundo en Ushuaia, ida y vuelta; desde entonces cambié mi adicción a la ropa por mi adicción a los viajes.
Tengo mis momentos de Burro y también de Shrek. Hay momentos en los que me gusta el relajo, pero en general soy un poco Shrek, a gusto disfrutando de mi soledad.
Soy Generadora Manifestante en Diseño humano, siempre voy a mil con distintos proyectos en los que estar y en ocasiones me molesta que no puedan seguirme el ritmo. Así que delegar es la tarea más difícil de la semana.
Y mi secreto más íntimo, es que soy amante del dulce, tanto que en momentos de abstinencia en la alacena corro a la cocina y soy Martha Stuart preparando unos cupcakes de chocolate.
Porque todo ya está en ti y eso ya lo sabes, solo que no alcanzas a ponerlo en las palabras adecuadas y yo puedo ayudarte a hacerlo.
Agenda una asesoría gratis de 30 minutos para aprender los primeros pasos para comunicar de forma clara, genuina y única todo el valor que tienes para ofrecer.
Si puedes destacar como la líder que eres, bajo tus propias reglas, siendo auténtica y sin la presión de hacer todo perfecto, mientras atraes a los clientes con los que de verdad quieres trabajar.
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Así fue cuando dos emprendimientos fallidos más tarde, después de trabajar en agencias de marketing y con clientes con los que no vibraba ni conectaba con su mensaje, decidí que quería hacer las cosas diferentes.
Estaba harta de trabajos convencionales, quería ser mi propia jefa y ayudar a otras dueñas de negocio con mis talentos, para pulir el valor de lo que ofrecen y convertirlo en el diamante que tienen el poder de ser.
Así fue cuando dos emprendimientos fallidos más tarde, después de trabajar en agencias de marketing y con clientes con los que no vibraba ni conectaba con su mensaje, decidí que quería hacer las cosas diferentes.
Estaba harta de trabajos convencionales, quería ser mi propia jefa y ayudar a otras dueñas de negocio con mis talentos, para pulir el valor de lo que ofrecen y convertirlo en el diamante que tienen el poder de ser.
Porque para mi no se trata de escribir para atraer más clientes y vender más, se trata de comunicar tu propósito con el mundo, conectar de forma genuina con tus clientes y ayudarles a mejorar sus vidas con tu negocio.
Así que si lo único que te interesa es el dinero. este no es el lugar para ti.